QUERIDA ABUELA

QUERIDA ABUELA PACA:

Hoy 26 de julio de 2017 , la persona que me ha enseñado todo en esta vida habría cumplido 95 años.

Mi abuela Paca hoy cumpliría 95 años. Una de las dos personas que ya se han marchado y a la que más echo de menos todos los días.

Fue mi madre, mi amiga, mi consejera y con la que aprendí todo lo relacionado con la cocina, el orden y valores morales, a ser buena persona, a creer en las causas justas, a ser terca y conseguir mis objetivos y a luchar por ellos hasta el final.

Mi abuela era una mujer con mucho carácter y genio hasta el ultimo de sus días. Su vida estuvo llena de piedras y pedruscos en el camino. Viuda con 28 años, una hija de 4 años a su cargo y otro bebé en camino. Fue mujer sin remilgos, fuerte y buena persona, de esas que no se dejaban pisotear y que en muchas ocasiones no soportaba a quien tenía cerca y sin embargo callaba para no dañar.

Esa abuela que ejerció de madre absolutamente porque la biológica no estaba en casa.Esa que se desvelaba cuando tenia fiebre y la que era el ama de casa y el alma de la misma. Fuerte como un roble pese a sufrir una insuficiencia cardiaca durante gran parte de su vida, esa que el Alzheimer me arrebató, pero que hasta el último de sus días supo quien era yo.

Esa abuela que nunca pudo estudiar, que sufrió una guerra civil, que crió a dos hijos sola y sin apoyos familiares. Esa mujer que fue criticada por no volver a casarse y sacar adelante a sus hijos fregando.

A día de hoy tiene dos nietos que la extrañamos a diario , Adrián y yo misma. Estaría muy orgullosa de nosotros pues nos hemos convertido en lo que ella siempre quiso, personas independientes económicamente y con estudios, lo que ella llamaba “ gente de provecho”. Ninguno de los dos hemos acabado siendo parásitos de la sociedad, ni vivimos de las pensiones de nuestros padres como hay otros casos.

Ejercemos la profesión que amamos, Veterinario y Enfermera y sé que allá donde esté se sentirá satisfecha.

Tiene dos Biznietos estupendos. A mi niña no llegó a conocerla porque falleció unos meses antes de su nacimiento.Ella sabía que se iba y  en muchs ocasiones me decía, “ Qué lastima hija, no la podré conocer”.

Sus palabras y consejos siempre los llevo conmigo y sé a ciencia cierta, que si a día de hoy estuviese viva, “ardería Troya”.Me cuidó y protegió como nadie. El sentimiento de pérdida fue y es el de haber perdido a mi madre verdadera. Siempre será así. Por eso quise hacerle un merecido homenaje. A ella y a todas esas abuelas que nos cuidaron y defendieron contra todo y todos porque creyeron en nosotros y supieron ver lo que gente ajena no supo.

 Recuerdo desde niña, pasar las horas con ella en la cocina, o el el cuarto de estar de casa pelando judías verdes, o haciendo punto. Ella me enseñó a tejer, si si, tal como leen. Soy de esas pocas que ha tenido la fortuna de aprender a coser, tejer y bordar de manos de su abuela.

Para todos aquellos que la conocieron la “ Abuela PACA” era una institución. Mujer de las de antes adaptada a las terribles circunstancias que la tenían puesta con los pies sobre la tierra.

Era una mujer que tenia “calado “ a todo aquel que la rodeaba y sabía perfectamente de qué pie cojeábamos cada uno. Nunca pemitiría cierta actuaciones que a día de hoy se están cometiendo y defendería a los suyos como la guerrera que siempre fue.

Esa mujer que me enseñó a hacer jabón en un cubo con el aceite que guardaba. LA que tenía frases  antológicas como “ hambre de la guerra teníais que tener”, como se te ocurriera dejar una brizna de comida en el plato. Esa que tenía puntería siempre certera con la zapatilla “ alpargata” desde cualquier ángulo o distancia a la que te encontarses.

Esa mujer que a mi primo y a mí nos obligaba a dormir las siestas después novela de medio día y te dormías “ sí o sí”.

Esa mujer que me compró un ciclomotor al cumplir los 16 sólo por el placer de darle un bofetón en el orgullo a mi padre, por el placer de poder revelarse contra quien no congeniaba solo por el mero hecho de hacerle rabiar.En aquellos tiempos yo no entendía cómo podía tenerle tan atravesado, pero con el paso del tiempo y viendo con perspectiva desde la actualidad, lo entiendo todo.

Una mujer que hizo muchísimas bien, otras no tanto, pero que le fueron reprochadas muchas veces y que es muy curioso criticadas por quien a dia de hoy hace que la historia se repita.

Un 26 de Julio de 1922 nacía en Valdepeñas , Ciudad Real, esta super mujer. Nace en tiempos convulsos y no dejarán de serlo hasta el día en el que nos dejó. LA vida la puso a prueba, trabajó siempre muchísimo. Casi analfabeta. Y desde muy jovencita se vino a la capital a servir. Pasó un tiempo siendo parte del servicio de de personas ilustres de aquellos tiempos, como según relató en muchas ocasiones  en casa de una tía de Bertín OSborne, por ejemplo.

Una mujer que vendió parte de su capital y propiedades para costear un tratamiento a su marido, enfermo de tuberculosis y que falleció a temprana edad en el hospital de enfermedades respiratorias de Jaén, su famoso Castillo.

Hija única y sobrina única, con lo que la vida tenía guardada para ella una carrera de obstáculos de mayor envergadura que EL GRAN PRIX.

Fregó en colegios de Monjas, cosió medias. Hizo de todo para dar de comer a sus hijos y que éstos fuesen al colegio y no fuesen como ella.

Esa mujer que hoy más que nunca merece ser homenajeada y a la que en sus últimos días pude hacerlo cada día que estuvo conmigo en mi casa, hasta que su enfermedad obligó a llevarla a la misma Residencia para mayores en la que yo trabajaba y que me permitía tenerla cerca y vigilada.

Mi gran Mujer nos dejó un 27 de marzo de 2005. Reposa junto a su amado marido.

No hay día que no la recuerde por algún detalle o algún motivo. Su fuerza me acompaña y sé que de alguna manera me cuida a mí y a mis hijos y primo, desde donde ilumina nuestro camino y nos protege.

Feliz cumpleaños querida “ Nonna” mi “ mamma”.

Te echo muchísimo de menos.